Regularmente cuando pensamos en el emprendimiento consideramos que es un esfuerzo individual, resultado de un sueño o meta que una persona se propone. Muchas veces consideramos -erróneamente- que el emprendedor es una especie de “lobo solitario” que toma su idea y la lleva lejos. En esta ocasión, nos vamos a referir a otro modelo de empresas que se apoyan en el esfuerzo familiar y, para ello, te vamos a compartir algunos puntos fundamentales de la nota escrita por Mario Rizo Rivas para Forbes México.

De acuerdo con el autor, todas las empresas -sin importar su tamaño- son como un árbol, pues surgen de una semilla, que es la idea; que necesitó abono y agua, los recursos; así como de cuidados muy especiales, el trabajo. Al poco tiempo, surge la planta que comienza a dar sombra y frutos, que son las utilidades. Ahora bien, hay una serie de pasos a seguir que deben ser tomados en cuenta para lograr una empresa familiar exitosa, a continuación, te los compartimos:

Primer paso. Un negocio se logra si sabemos cómo es que funciona.
Pregúntate, el servicio que quieres ofrecer ¿sabes cómo hacerlo? ¿identificas dónde están los clientes que estarían en disposición de comprar tu producto?

Segundo paso. Una cosa es el negocio otra las cuentas personales.
La separación es total y no hay margen de negociación. Espera, al menos, un par de años para permitir que tu negocio pueda generar utilidades, debes tener una disciplina férrea para permitir que el negocio florezca. Tus gastos personales deben correr por tu cuenta.

Tercer paso. Preparación profesional, empresarial y humana.
Hay que estar listos física, mental, espiritual y profesionalmente para ser capaz de dirigir un negocio, reduce al mínimo las decisiones al azar o por corazonada. Apóyate de profesionales y expertos para decidir lo mejor para tu empresa.

Cuarto paso. La autoconfianza y la humildad
Hay que estar convencido: si lo crees lo puedes hacer. Hay que mantener una actitud de disposición para colaborar con tus clientes, debes orientarlos y ayudarlos. Hay que ser siempre agradecidos con aquellos que te compran como con aquellos que deciden no comprarte.

Quinto paso. Hay que ganar-ganar
Por supuesto que tu empresa debe ganar, pero no puede ganar si tu cliente no gana también. Tu empresa debe ser una alternativa de ayuda para tus clientes. Para ello, es fundamental construir una relación de confianza con todos tus clientes, que sientan en ti un respaldo permanente, no importa si te pagan al contado o a crédito.

Sexto paso. Un buen vendedor es un buen comprador.
Debes elegir muy bien a tus proveedores, y vuélvete un cliente único y modelo para ellos. Cumple siempre con tus pagos y procura respetar las condiciones de compra.

Séptimo paso. El motor de una empresa es el capital humano.
Una acción básica, y que puede parecer sencilla, es la selección del personal que va a colaborar contigo. Ellos son el principal activo en tu negocio, la clave para generar utilidades es que cada uno de ellos se sienta comprometido y motivado para trabajar contigo.

Octavo paso. Dale a tu cliente más de lo que espera
Hay que enfocarse en hacer siempre lo correcto, dale a cada uno de tus clientes lo mejor de ti, entrégales un producto o servicio que tenga un extra más allá de lo que negociaron en la compra-venta. Hay que trabajar en hacer bien las cosas, interesarse en lo que tus clientes necesitan y trabajar siempre en equipo.

Puedes consultar la nota completa en el siguiente link: https://www.forbes.com.mx/8-pasos-para-iniciar-tu-empresa-familiar-y-lograr-el-exito-en-los-negocios/